El Las Palmas busca una victoria para la alegría
En el fútbol, sobre todo a finales de temporada, llegan algunos momentos en los que los objetivos ya prácticamente no existen y hay que mirar ya con vistas al futuro. Sin embargo, cada partido es distinto y tiene que ser honrado de la mejor manera, sobre todo para los aficionados, que son la verdadera alma de este deporte y negocio. La temporada del UD Las Palmas, que bajó la temporada pasada a la Liga 123, ha sido bastante pobre y sin verdaderas emociones, como bien refleja el estado actual del conjunto canario, anclado en el decimotercero lugar de la tabla con apenas 43 puntos cosechados en 35 encuentros.
El conjunto entrenado por Pepe Mel, un histórico de los banquillos del fútbol español, se encuentra en una situación anónima y poco agradable. Tras haber vuelto a Segunda después de unos años en los que hizo un gran fútbol a las órdenes de Quique Setién, el equipo de la capital canaria no ha sabido aguantar el chaparrón, ni volver a levantarse. Lo demuestra el andamiento regular en la temporada actual, en la que ya no tiene objetivos y aun así tendrá que tener cuidado con no caer en el peligroso pozo del descenso.
El partido del próximo domingo contra el Lugo en casa, de hecho, suena como importante para alejar el fantasma de una caída hacia lo profundo de la tabla. El conjunto gallego, que se halla en el decimonoveno lugar con 37 puntos, vendrá a Las Palmas para intentar conseguir una victoria que lo aleje del descenso, zona en la que se encuentra por ahora. Los anfitriones, entonces, buscarán tres puntos necesarios ante todo para dar una alegría a sus hinchas, ya de por sí bastante frustrados por pasar de jugar contra el Barça a jugarse la permanencia en Segunda en menos de doce meses, pero también para evitar resbalar y encontrarse atrapados en la lucha para no descender. Bajar a Segunda B sería un fracaso importante para el conjunto canario, que en el partido contra el Lugo es el claro favorito según las apuestas de fútbol, pero sabe que no se puede confiar y tendrá que poner todo el empeño para conseguir un triunfo salvífico.
Para ganar, Mel se encomendará a Rubén Castro, goleador consolidado que ya hizo la historia del Betis en Primera División y suele ser decisivo cuando la situación es complicada. Autor de 12 goles hasta ahora, el canario es la principal esperanza de Las Palmas, que contra el Lugo intentará revertir una tendencia poco favorable. Según las estadísticas, de hecho, en los últimos 7 años el Lugo se ha impuesto en 4 de los 7 partidos jugados contra los canarios, que han logrado ganar solamente uno. Una razón de más para los isleños para ganar en el partido del próximo domingo, que además de dar una alegría a la hinchada, daría un toque de aire fresco a un ambiente en el que huele a podrido hace demasiado tiempo.